La relación entre la obesidad y cáncer no es algo nuevo. Desde hace años, los expertos en oncología han realizado estudios para evidenciar el nexo directo entre la acumulación de grasa en el organismo y el desarrollo de tumores de mama o de colón.
Hasta el año 2016 eran sólo seis los tipos de cáncer con una relación documentada con la obesidad. Sin embargo, ese mismo año, la Organización Mundia de la Salud (OMS) agregó ocho nuevos tumores cancerígenos a la lista negra luego de revisar estudios científicos realizados sobre este tema.
La conclusión a la que se llegó en ese entonces era más que contundente.
Existe “suficiente evidencia” para afirmar que el exceso de peso se relaciona de manera directa con tumores digestivos (en el esófago, estómago, hígado, vesícula o páncreas), de ovario, tiroides, cerebrales, o el mieloma múltiple (cáncer en la sangre).
Cáncer de seno, ¿la obesidad aumenta el riesgo de padecerlo?
Definitivamente sí. Aunque la influencia de la obesidad en las posibilidades de padecer cáncer de seno está ligado a la etapa menopáusica de la mujer. Te explico con más calma. Antes de la menopausia, una mujer obesa tiene un riesgo menor de enfrentarse a un cáncer de seno, en relación con aquellas mujeres con un peso saludable.
Pero la situación cambia drásticamente cuando se llega a la menopausia. Entonces las mujeres con obesidad se enfrentarán a un riesgo 1.5 mayor que aquellas con un control saludable de su peso corporal.
¿Cuál es la relación estadística entre obesidad y cáncer?
Hace ya más de una década, en 2002, se calculó que cerca de 41 mil casos de cáncer en Estados Unidos habían sido producto de la obesidad. Esto significa que cerca del 3.2% del total de los casos de cáncer que se descubrieron ese año tenían una relación con la obesidad.
Otro informe, generado también en Estados Unidos, evidenció que el 14% de las muertes por cáncer en hombres y el 20% en mujeres, se debieron al exceso de peso o a algún nivel de obesidad en su organismo.
Todos estos estudios y evidencia no sólo indican el papel de la obesidad como promotora de algún posible cáncer, sino que aseguran con base en datos suficientes que eliminar el exceso de grasa corporal es un factor decisivo en la protección frente al cáncer.
Prevención y soluciones
En una etapa temprana de prevención, evitar subir de peso te ayudará a reducir considerablemente las posibilidades de padecer distintos tipos de cáncer.
Se recomienda establecer desde la infancia, adolescencia y, claro, en la edad adulta, un régimen alimenticio saludable, así como tener actividad física suficiente y constante para evitar la acumulación de grasa que podría tener como consecuencia un exceso de peso y obesidad.
Por otro lado, si tú ya estás sufriendo los embates de la obesidad en tu salud, mi recomendación para reducir el riesgo de enfrentarte al cáncer es que consideres la cirugía bariátrica como una opción para perder peso y reducir ésta y otras comorbilidades graves.
De acuerdo a la estadística médica, una reducción de 5 al 10% del peso total en tu organismo significa grandes beneficios para tu salud. Imagínate entonces lo que sucedería si te deshaces del 50 u 80%, porcentaje de sobrepeso que puedes llegar a perder en una cirugía de Manga Gástrica o de Bypass Gástrico.
No dejes pasar más tiempo, tu salud es una razón de peso.